Y lo peor es que el discurso antisindical ha calado entre el aborregado pueblo español. Y así —en el mercado, en el autobús y en la cola del pan— se oye hablar de los "privilegiados liberados que no dan palo al agua".
Lo que más nos asombra es que incluso haya calado entre los dirigentes y trabajadores de CCOO, UGT y CSIT-UP, quienes están pactando un acuerdo en la administración pública madrileña para reducir la presencia y representación sindical drásticamente.
De 120 comités de diferentes estratos administrativos, se pasará a 36; de 300 representantes, apenas al centenar.
Si los sindicalistas de CCOO y UGT ni siquiera saben negociar y defender su propio estatus, ¿cómo coño van a defender a los trabajadores que dicen representar?
Después de vender (sin luchar) a la clase trabajadora con el "pacto social" de las pensiones... ahora se venden a si mismos (por supuesto, sin luchar).
Y encima llaman "compañeros trabajadores" a los maderos-perros hijoputas que el capital azuza contra los trabajador@s de AENA, que esos sí que luchan y defienden sus puestos de trabajo.
Para más información y para vergüenza de los presuntos sindicalistas que se han (y nos han) vendido vaya usted a saber a qué precio: http://www.elpais.com/articulo/madrid/Comunidad/sindicatos/ultiman/pacto/reducir/liberados/elpepuespmad/20110216elpmad_1/Tes
Comprendo tu reflexión... No obstante, todos sabemos que CC OO y UGT han sabido negociar muy bien sus propios intereses; lo que no han tenido, desde hace años, es el más mínimo interés en negociar el de los trabajadores. Otra cosa es que tras los últimos acontecimientos vergonzantes, hayan “tenido” que decidir sacrificar parte de su "plantilla" para mantener sus estatus vitalicios como sindicatos del poder; y así, de paso que se bajan otra vez los pantalones, pueden lavarse un poco la cara ante los afiliados en una muestra de pretendida humildad.
ResponderEliminarDejando aparte lo que pretende la derecha al respecto… pues cualquier parecido con mi pensamiento libertario es pura coincidencia, he de admitir que yo personalmente quiero que desaparezcan los sindicatos "subvencionados" para siempre; o sea, los sindicatos del Poder. El poder corrompe, y el sometimiento al poder pudre, jode muy mal, y además es una vergüenza
Gloria Ge