En 1975 yo tenía 15 años (a diferencia de mi compi que no había nacido aún). Y miraba el mundo con ojos curiosos, emocionado por lo que ocurría.
La palmó Franco y parecía que se movía la cosa o, por lo menos, que todo podía cambiar. Fuera de este puto país de mierda también parecía que todo iba a cambiar radicalmente: la lucha antiguerra de Vietnam, las secuelas del mayo francés, el nacimiento de los movimientos alternativos...
Luego la cosa se fue enfriando y el sistema nos fue adormeciendo y acunando en un colchón relleno de "confort", sociedad de consumo, perspectivas de mejora, bienes de consumo, hipotecas y democracia.
Y ahora que el sistema ha hecho un ¡crack! del copón, vamos perdiendo los bienes de consumo, las perspectivas de mejora... las hipotecas se sustituyen por desahucios y el sistema democrático no nos vale.
Y volvemos al principio: al momento donde parece que todo puede volver a cambiar radicalmente. Empiezo a mirar el mundo otra vez con ojos curiosos.
No fallemos esta vez.
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